La cacería de brujas por fotos de envase de ambientador, pero no agradecen el trabajo de los médicos con el paciente

Prensa Única RD

Por Ricardo Rojas Vicioso

Señores la sociedad dominicana está en peligro, y cada vez que veo la reacción de un minúsculo grupo de gente criticando la filtración de fotos de un acontecimiento o hecho no muy común me da rabia e indignación.

No todos los días se ve a un hombre, salir de lo común o normal a lo anormal, dentro de una relación sexual con su pareja siempre será motivo de curiosidad y sobre todo será noticia.

El que un hombre pida o lo haga el mismo, que le introduzcan un envase de un ambientador por su ano, será siempre una situación que va a generar curiosidad y noticias.

Pero además antes de intentar hacerlo, pienso que quizás esa pareja sabía que su acción o experiencia tenía un nivel de peligrosidad, a lo que se arriesgaron.

Pero ahora para las autoridades de Salud, los malos son los médicos, si critican la foto deben también hacerlo con el hecho, pero no, los médicos ahora son los malos

Pienso que esas autoridades son muy ingenuas, y los demás críticos que les acompañan pensando que en estos tiempo de la comunicación, de celulares inteligentes, un acontecimiento como ese iba a pasar y no se sabría.

El personal médico, y  todo el que estuviera en ese hospital en ese momento, me imagino que eso era un secreto a voces, y cada uno informando a un amigo, familiar o pareja de lo que allí estaba ocurriendo.

Eso me recuerda una noticia de varios años, que leí, desde Alemania, y en esa ocasión fue una mujer que se quedó pegada de un perro Pastor Alemán, con quien al parecer sostenía relaciones, la foto se veía la mujer con el perro a su lado en la camilla, el canino había sido ya sedado 

Sin embargo, no vi en ningún momento que las autoridades alemanas, atacaran o sancionaran médicos por esa noticia.

Por nuestras parte lo que debemos es felicitar el trabajo de ese personal médico que realizó la extracción, y que los dejen en paz, y si buscan culpable de eso, será el hombre, ya que ni su pareja, él fue que pidió que se lo hicieran, y si se respeta la intimidad de las personas, también se debe respetar y valorar el trabajo de los profesionales médicos.

Además el conocerse esa noticia, es más positiva de lo que sus críticos se imaginan, ya que la mismas, sirve de advertencia para que las parejas cuando vayan hacer el amor, tenga más cuidado con lo que van a experimentar, y tomen las precauciones necesarias.

Finalmente, ni la radiografía, ni las publicaciones en ningún momento a mencionado nombre, solo que es un hombre de 40 años que al parecer, le produce placer que le anden por su chiquito, y si él lo disfruta es su problema.

Pero ese tipo de situaciones y emergencias que se presenten entiendo yo y deben entender también, las autoridades de Salud mejor que yo, que debe ser documentada, y muy bien procesadas, con vídeos, fotografías y hasta testimonios de los médicos, como material de enseñanzas a los estudiantes de medicina y que sepan que hacer, como hacerlo y dónde hacerlo, en el futuro si se le vuelve a presentar otra emergencia con ese objeto u otro, ya que las parejas seguirán experimentando, mientras que los médicos seguirán salvando vidas, sin importar que las personas las ponga ellos mismos en peligro buscando placeres.

La distinguida doctora Ana Simó psicóloga, terapeuta sexual, familiar y de pareja, y especialista en manejo de duelo, dependencia emocional, autoestima y  no sé qué cosas más, lo que debe hacer antes de criticar, la supuesta violación de la privacidad de ese hombre o pareja, es aconsejarlos así como otras parejas que pudieran estar sintonizadas con esa misma práctica.

Mientras que las autoridades de salud, en vez de estar buscando sancionar médicos, deben mejor felicitarlos por su trabajo profesional, y el tiempo de estar trabajando en un trasero, y mejor ocuparse de la invasión de mujeres haitianas, especialmente parturientas, que están desangrando, el presupuesto de salud, y en ocasiones dejando las dominicanas, sin esos servicios que el pueblo paga con sus impuestos, mientras que los extranjeros les sale gratis.